domingo, 27 de octubre de 2013

9. Mikel Lighwood.



9.Mikel Lighwood.

-Ey chicos aquí estoy.
-¡Ah! ¡James!- Sarah se alejó de Duke corriendo y fue a donde James estaba.
-Anne, debes estar contenta, por fin conocerás al rubio hiperhormonado de ojos turquesa.
-Jaja, es cierto.
Sarah coge a James del brazo, como si fueran una pareja. Lo que hace que Duke y Mary se pongan celosos.
-Oh, Mary veo que traes compañía. Encantado -le tiende el brazo a Anne en forma de saludo. - Mi nombre es James, James Carstairs.
-Ah… lo mismo digo, mi nombre es Anne, Anna Marie Smith.
-El mio es Duke, Duke Kyle.
-Uno de los praetor lupus por lo que veo, mucho gusto.- Y le extendió la mano en señal de saludo.
-Me temo que no puedo decir lo mismo… - dijo en voz baja, tan baja que sólo Mary que estaba lo suficientemente cerca lo pudo oir.
-Oh, allí está Mikel, Ey Mikel ven para aquí.
-Voy.
Los ojos de colores de Anne dejaron de mirar a Duke, para pasar a mirar a Mikel, el no era de los más atractivos, ya que era delgado, sin una musculatura muy definida y no parecía ser muy alto. Pero a Anne le cautivaron sus ojos azul marinos , su cara de niño y su pálida piel blanca pintada por runas. Cualquier artista lo hubiera llamado ‘’hermoso’’ de alguna manera.
-Hola, mi nombre es Mikel, Mikel Lighwood. Mucho gusto, hermosuras y hombre lobo. -dijo el nuevo integrante con voz alegre. Se acerca en un solo movimiento a Mary- Tu debes ser Mary, Mary Herondale. Mucho gusto. - Y le planta un beso delante de todos.
- ¡Qué te crees que haces! -le dice Mary después de abofetearle.
-No te enfades Marchy, es sólo un beso.
-Mi nombre es Mary.
-Si, bueno me da igual. -le ignora por completo y se gira hacia James- Jem nos vamos ya.
Éste estaba con la boca abierta, y los ojos mirando fijamente a Mary.
-Mikel… no la vuelvas a tocar, ella es mi.--
-¿Tu qué? -Le dijo éste con un tono de burla.- Que yo sepa ella no está saliendo con nadie ¿me equivoco?.
-Mary, ven un momento. - Le cogió de la mano y le alejó de la multitud.
-Ey, Jem ¿No decías que teníamos prisa? -Le dijo Sarah con decepción en su voz.


-Señorito James Carstairs era necesario que me sacaras del grupo. ¿Qué es tan importante que no pueda esperar?
Éste le besó, con más pasión que nunca, sin darse cuenta él la estaba aferrando contra sí, y ella no se había echado para atrás como había hecho con Mikel. Y sin saberlo ni esperarlo sus manos se movieron hacia el cuello del joven, y lo aferró más contra sí misma. Los labios de James eran suaves, pero a la vez rudos. Ese beso era diferente, en este instante él la quería devorar, hacerla suya, que nadie más pudiera tocarla salvo él. Y él quería transmitirle esos sentimientos que costosamente tendría que explicar después con palabras.


Anne había salido corriendo en busca de su amiga, pensaba que los estaba alcanzando cuando vio dos sombras abrazadas en un callejón. Eran ellos, lo sabía por el contraste de rubio con pelirrojo. Pero no les quería molestar, así que volvió a donde estaba el grupo.
-Lo siento chicos, no les pude seguir.
-No pasa nada, ¿Y tu eres?
-Ahaha, que descuidada. Mi nombre es Anna Marie Smith. Mucho gusto, por favor no me beses ¿si? Sería mi primer beso y no quiero que mi primer beso sea un beso saludo.
-No tenía intención de hacerlo, espera ¿beso saludo?
-Sí, pensé que era un beso saludo, puesto que tienes un acento americano muy evidente, y he escuchado que allí se besan en la boca muy frecuentemente, en forma de saludo.
-Eso es una mentira, espera ¿y eso me lo dice la inglesa con acento francés?. Es obvio que has estado viviendo en francia, ma amie, y que tienes un acento francés peculiar.
- Oh la lá, pensé que tardarías en darte cuenta, como bien dices sí, tengo acento francés, porque nací allí.
- ¿Y qué ha hecho que una joven francesa termine en Londres?
- ¿Tienes mucho interés en saberlo?
-Um… un poco bastante ¿por?
-Porque te vas a quedar con la curiosidad.
-Ah… vaya… así que intentas ser el diablo vestido de rosa, ¿no?
- ¿Perdón?
-Se me olvidaba que eras francesa.
-No te metas conmigo, sé lo que has dicho, pero no entiendo a qué viene. No me intento hacer la interesante, es sólo que no le pienso  mi historia a un desconocido.
- Ah… vaya… bueno, y si no me quieres responder a esta historia, me puedes decir ¿de dónde sacaste el collar de Dafne? Si no lo sabes es una reliquia en el submundo, con él puedes ganar miles de dólares.
-Espera ¿cómo sabes quién es la que está en mi collar.? Pocas personas me han sabido decir que ella era Dafne.
-Ah… te vas a quedar con la curiosidad.


-James… para, aquí no podemos. Tenemos que ir a ver a Alaric.
El joven se hallaba abrazando a Mary, besándole el cuello, la clavícula y su colgante con el anillo de los Herondale.
-Mary, no quiero que beses a otros chicos, no te lo permitiré.
- ¿Ha?
-Lo que quiero decir… dios, esto se me da fatal… Es que aunque ya sabes que vamos a ser marido y mujer, y que en cierto modo serás mía quiero que seas mía por voluntad propia y no porque te obligaron así que voy a ser directo. ¿Estas dispuesta a contraer matrimonio a voluntad propia. ?
- ¿En pocas palabras?
-¿Quieres salir conmigo ? - Le dijo el joven que la tenía agarrada por la cintura y le miraba con esos ojos turquesas que tanto adoraba Mary. <<Dios>> pensaba ella <<¿quien se negaría a estar contigo?>>
-Mmm… no sé… deja ver. -Le besó de nuevo. - Tu media de besos es un 7 así que tienes que mejorar. - Era obvio que mentía, a ella le encantaban sus besos. Acto seguido le subió la camiseta. -Bueno, aquí no está nada mal. - Y después le sujetó la cara- Y me encantan tus ojos… así que con un poco de ayuda, estoy segura que serás el novio ideal .
-Con un poco de ayuda ¿te refieres a los besos?
- ¿A qué si no? Pero obviamente, la profesora seré yo. -Y le besó de  nuevo.
-Entonces ¿ es un sí?
-¿Tu qué crees?
-Mmm… no sé, pensé que sólo me querías provocar.
-Mira que eres idiota. -Le rodeó con los brazos. -Nunca he tenido que dudarlo, mi respuesta es sí.

sábado, 12 de octubre de 2013

8.Sarah


8.Sarah

-¡No puede ser! Mary ven aquí un momento, necesito hablar contigo -le dijo su amiga la sirena con una voz un tanto peculiar.
-Voy, espera aquí un momento ¿vale?
-Es un asunto de chicas -le dijo a Duke
-No hay problema, si tienes que usar el baño 
para algo
, ya sabes que puedes usarlo perfectamente.

-Gracias, pero no es ese asunto del que tengo que hablarle - y le sonrió mecánicamente, sin sentimiento alguno en lo que hacía.
Cuando por fin llegaron a estar lo suficientemente lejos de la vista de Duke Anne le chilló lo máximo que pudo a Mary.
- ¡PERO TÚ ESTÁS LOCA! ¡NOS VAMOS A METER EN LA BOCA DEL LOBO COMO VAYAMOS A VER AL TAL ALARIC!
-Pensaba que eso era lo que querías, meterte en la boca del lobo digo.
-Mary no estoy para bromas, sabes que él es importante para mí, al igual que tú.
-Pero no es lo mismo, y lo entiendo, sin embargo os lo estoy pidiendo por favor, necesito ir a ver a ese hombre, contiene una carta que es muy importante que lea para encontrar a mis padres, tengo que encontrarlos Anne, nunca he estado separada de ellos, o al menos nunca desde que tengo uso de razón y no porque unos demonios de pacotilla los hayan secuestrados va a ser diferente. Comprendo que él tenga miedo y no quiera acompañarme, pero lo necesito, necesito que vengáis conmigo, con vosotros me siento segura.
-Mary…
-Eh tú, era Marcie ¿no?
-¿Perdón? -Mary se dio la vuelta y vio a Sarah, su ‘’prima’’ vestida con su uniforme negro de nefilim, con varias dagas sujetas en su cuerpo, y cabello chocolate recogido y sus ojos negros mirándole con furia.
-No , te he dicho que es Mary.
-Ni que me importara, a ver, si ya no es suficiente que le quites el tiempo a James,    
¿ ahora me lo tienes que quitar a mi haciendo que yo tenga que hacer de niñera tuya?
-No te comprendo, ¿de niñera mía?
-Normal que no lo entiendas querida, eres estúpida. A ver te lo explicaré lentamente para que lo entiendas : Me han man-da-do a que ven-ga a por ti, pa-ra ir a ver al ma-go A-la-ric.  ¿Lo entendiste ahora?
-A ver niñata, ¿A ti que te pasa? -Le dijo Anne, que al contraste con Sarah ella parecía un Ángel vestido de colores pasteles y Sarah el demonio vestido de negro.
-Já ¿Me hablas a mi?
-¿Hay aquí alguna otra idiota aspirante a gótica que se las da de princesa cuando en verdad es una engreída de M*****.?
- ¿Te crees que esa es forma de hablarme? ¿Eh? ¡ Pon pon rosa!
Y así continuaron hasta que se vieron metidas en una pelea de ‘’gatas’’ salvajes, la cual sería parada poco después por Duke, que se acercaría al lugar a causa de los gritos provenientes de éste.
-¿Quereis parar ya de pelearos? ¿No sois ya mayorcitas?
Cuando logró separarlas se le quedó mirando directa y descaradamente a Sarah, ella pese a estar un tanto despeinada seguía teniendo esos rasgos que los diseñadores llamarían hermosos, ojos grandes, color negro azabache, cabello largo y liso, de un color chocolate que brillaba por si solo, piel blanca, más de metro setenta, esbelta… y la lista de adjetivos podría continuar en la mente del joven, pero no fue así.
-¿Qué me miras?
-¿Yo? -Se señaló a sí mismo con el dedo
-¿Hay algún licántropo a parte de tí aquí?
-¿Cómo sabes lo de que soy un licántropo?
-Vamos, no soy tonta, por el collar de praetor lupus, la asociación esa que os inventasteis los hombres lobos para ayudar a los mundanos que se van a ‘’transformar’’ a completar su iniciación correctamente. ¿Me equivoco?
-No, es todo correcto. Mi nombre es Duke, Duke Kyle , encantado- éste le tendió la mano.
-Supongo que en este tipo de casos debería decir por cortesía que lo mismo digo y me presentaría, pero no puedo, tengo prisa, me tengo que llevar a tu amiguita a ver al mago Alaric.
-Espera, ¿Vas a ir a ver al mago Alaric?
-Si¿Por?
-Necesitareis compañía, así que Anne y yo también vamos.
-Duke- le dijo Anne por lo bajo.
-De acuerdo, siempre y cuando no molestéis. -Le dijo Sarah con superioridad, como si ellos fueran niños de primaria y ella una adulta.
Y se fueron de camino él al lado de ella y Mary y Anne a unos pasos por detrás.
<<¿Puedo preguntarte tu nombre?>> le decía él. <<Me llamo Sarah, Sarah Lewis, pero mi nombre nefilim es Sarah Lightwood. >>
O eso era lo que creía haber escuchado Anne desde atrás, que pese a que ellos no hablaban muy claro, ella se mantenía atenta a lo que decían.
-¿Has visto eso?
-¿Qué?  Que el está coladito por ella, ya, era de suponer, muy a mi pesar he de admitir que es bastante guapa.
-No es justo, yo llevo mi vida entera enamorada de él y él ni siquiera me mira, me ignora, me trata como una hermana y lo peor de todo es que después me pide consejo para ligar. -Anne hizo pucheros, lo que Mary sabía que tarde o temprano iba a pasar.
-Anne, no te pongas así, todo estará bien, te lo prometo.

domingo, 6 de octubre de 2013

Premio del concurso.

Hola a todos, no se si os acordaréis, probablemente no, de que hice una especie de ''concurso'' en él cual hubieron muy pocos participantes, pero bueno no importa. Felicito a Maria Dolores, por haber acertado no en todos pero en casi todos los personajes de las fotos. Estos eran los siguientes:
-Mary y James, - Anne y Mikel, y Sarah y Duke.
Como prometí aquí está el dibujo, ella me dijo que quería que fuera con James y Mary así que aquí lo tienes, y gracias por participar.



Estoy planeando hacer otro concurso, pero este será diferente, consistirá en que cada uno de vosotros os inventaréis un personaje le daréis los datos principales, tanto físicos como psíticos si queréis que sea bueno que lo sea y si no no pasa nada. Yo elegiré  el que más me guste y lo añadiré a mi historia.
Espero que en éste participen más personas. 
Un beso, Lorraine. 

7.Sirenas

7.Sirenas
-Ah, lo siento no vi que tenías compañía, como no sueles traer a nadie al instituto.
-Mama, ella es Maryssa Herondale, la hija de Jace.
-Ah, sí, he oído hablar mucho de tí, así que por fin conozco a la adorada hija de Jace Herondale. Es un placer- Y hizo una reverencia.
-Lo mismo digo, así que usted es Enma Carstairs,un gusto en conocerla, había oído hablar de ti, mi padre me ha hablado de ti varias veces, y sin duda eran buenos comentarios.
-Igualmente, siento haber molestado vuestro momento de intimidad-dijo Enma con un tono
bufón.
-Oh, si no nos has interrumpido en ningún sentido, simplemente teníamos pensado ir a desayunar algo ¿No es así James?
-Así es.
-Lamento decirte Mary, pero mi hijo no te acompañará a ningún lugar, tiene cosas que hacer antes de irse por ahí, entiendo que tengáis la necesidad de comer algo , pero …


-Y así continuó hablándome la madre de James, que si era el deber de su hijo permanecer allí encerrado, que debía hacer esto y lo otro que si bla bla bla hasta que me vi fuera del instituto llamándote para que me recogieras . ¡Ya entiendo el por qué no trae a nadie al instituto!

-Mary, no te pongas así. sabes perfectamente que el no trae a nadie al instituto por el hecho de que los mundanos, a no ser que se quite el glamour, no pueden ver nada del mundo de las sombras además dudo que él fuera capaz de invitar a nadie allí, no tendrían intimidad alguna ¡ y termínate el desayuno de una vez!

-En eso estoy Anne, pero tenía que contártelo todo con detalle ¿no?. Y no iba a esperar a estar en grupo junto con mis ‘’primos’’ -Mary tuvo que soltar su tostada y el café y dejarlos en la mesa para hacer el gesto de las comillas.- con Duke y mucho menos delante de ÉL- subió el tono de su voz en aquella palabra.

-Sé que debe ser duro enterarte de este tipo de cosas, haciendo hincapié en el hecho de que según tú un tío buenorro se ha plantado delante tuya, te ha besado y te ha dejado claro que seréis algo más.

-Uff, ya ves esa es la parte más dolorosa -le dijo en tono burlón a su amiga.- Es cierto que al principio pensaba que era una estupidez eso de que me iba a casar con alguien a quien no conozco, y no es que ya pueda decir que le ame, pero siento algo por él.
-Nena lo que tu sientes por él es atracción, según lo que me has contado, cualquier chica de instituto se volvería loca con un novio como él así que no me vengas que si es amor o no, tu lo que tienes son las hormonas revolucionadas y cada vez que ves a un tío bueno te derrites.
-Eso no es cierto, y lo sabes. Eres tú la que va babeándo por ahí, enamorada de un hombre-lobo que no te hace caso. Además sabes perfectamente que ambos clanes, los licántropos y el de las sirenas tanto el de las nereidas como el de las náyades no te permitirán tener ningún tipo de relación con él.
-Lo sé, y más teniendo en cuenta que provengo de una mezcla de ambas.
- Um ¿Qué quieres decir?
-Tu ya lo sabes, la diferencia principal entre las nereidas y las náyades, es un hecho, a ti te encanta la mitología por lo que ya lo debes saber.
-Sí, sé que la diferencia principal es que las nereidas son ‘’sirenas’’ del mar mediterráneo y que las náyades son ‘’sirenas’’ o ninfas como las llaman los humanos, de agua dulce. Y tu al ser una náyade es comprensible tu adoración con los chicos guapos.
-Ne, te equivocas, no soy una náyade, eso era lo que creía por el hecho de que soy bajita, y por mi supuesta adoración ‘’con mirar a los chicos’’ que tu sabes que se debe porque estudio la anatomía del cuerpo humano.
-No me vengas con excusas, continua.
- A ver, que yo creía que era una náyade porque las pruebas señalaban a ello, pero no lo soy, soy una híbrida, soy una mezcla,no sé cual de los dos era, pero solamente las sirenas de agua salada eran las que tenían poderes de adivinar el futuro, y las de agua dulce de poder trabajar con plantas. También está el caso de mi variación de estatura, cuando soy humana soy bajita, pero cuando soy una sirena, soy bastante ‘’alta.’’ Es cierto que no hay pruebas sólidas que lo demuestren, ya que mis padres me dieron en adopción y no dejaron ningún documento con algún nombre ni nada por el estilo.
-No te preocupes por ello, al menos tienes ese colgante. -El colgante al que Mary se refería era el único recuerdo de la madre de Anne. En forma de óvalo, color turquesa, con un dibujo de la cara de una antigua sirena muy famosa, Dafne.- Eso que tienes colgado en el cuello, amiga mía, será lo que te ayude a encontrar o al menos a saber quienes son tus padres.  Y haré todo lo que esté en mi mano para ayudarte, ni se te ocurra dudarlo.
-Nunca lo haría, sé perfectamente que siempre me ayudarás. Bueno, ¿nos vamos ya? Sabes que tengo que pasar por mi casa y cambiarme de ropa.
- Lo sé.

Ambas jóvenes se dirigían a casa de Anne, cuando llegaron no había nadie en ella, algo bastante normal ya que los fines de semana sus padres se iban de viaje por trabajo, Eric se iba a casa de un amigo y Anne seguramente se quedaría en casa de Mary.
-Siento el desorden.
-No pasa nada, si vieras como estaba mi casa ayer antes de que me fuera de ella, me dirías que estaba loca por no haberla limpiado antes de irme. -Ambas rieron ante la frase de Mary, pero no era lo mismo, lo sabían.
-En un minuto bajo, siéntate en el sofá.
La casa de Anne, era acogedora, con diseños asiáticos, paredes de papel, cuadros de dragones y de kanjis… Se podría decir con sólo mirar en ella que los que vivían allí no eran ingleses, o al menos no en su mayoría. La madre adoptiva de Anne, Sue Hinamori, era una famosa diseñadora de interiores y estudiaba en Francia cuando conoció al arquitecto Adam Wiles, y se casaron, pero Adam era estéril y no podía tener hijos, por lo que decidieron adoptar, cuando aparecieron dos jóvenes de dieciséis años frente a su casa dándole a su hija, ellos no pudieron negarse y la adoptaron. Poco después de la muerte de Adam, apareció Philip Smith que decidió llevarse a Inglaterra a su actual esposa Sue y a su hija adoptiva Anna Marie. Tuvieron un hijo, Eric, cuatro años menor que Anne. Eric era por el contrario de Anne, moreno, con el pelo negro de Sue y ojos verdes de Philip . Ellos no se llevaban muy bien, más bien eran lo contrario, Anne supo desde joven que no era humana, y a sus padres les costó asimilarlo pero al final la aceptaron tal y como es.
-Ya estoy lista.
-Woa- Le dijo Mary a su amiga.- Nena nos vamos a ver a el mago  Alaric, no a cenar con él en el Ritz.
Anne se había puesto uno de sus conjuntos favoritos, una camisa rosa chicle ajustada al cuerpo, con una falda corta de color blanco roto, acompañada de sus medias de la ‘’suerte’’ con estampados de flores al más estilo lolita, y una bailarinas a juego.
Anne era una fan completa del estilo lolita, pero no se puso ninguno de sus vestidos para ‘’no destacar demasiado’’ le dijo a Mary, y ella cuando escuchó eso le dijo que con su estatura y el tamaño de su pecho ya destacaba demasiado.  A lo que le respondió, << ¿Y tú crees que con tu larga cabellera rojiza al más estilo de Ariel no destacas?
Y así continuaron hasta que llegaron a la casa de Duke.
Tocan el timbre:
-¿Sí…? - Abrió la puerta el joven con cara de sueño. - Ah ¿Qué pasa chicas?
-Necesitamos que nos acompañes- le dijo Anne.
-Explícaros mejor, porque sabéis que paso de acompañaros a ir de compras.
-Lo sabemos Duke, pero no es por eso para lo que hemos venido, pero por la forma en la que nos has hablado últimamente me parece que cuando esto acabe no dudaremos en ir de compras contigo. Queremos, bueno mejor dicho quiero que me acompañes a ver a un brujo.
-¿¡Qué!? ¿Estas loca? Los brujos son peligrosos, quien sabe que te pueden hacer.
-Y a mi qué, necesito encontrar a mis padres, Duke, vosotros sabéis lo mucho que les adoro, y el mago Alaric es quien tiene una carta de mi madre para mí.
-Ah no no, no voy a ir a ver a un mago y menos al tal Alaric Keenesburg, antes prefiero comer carne cruda.
-Eh ¿Por qué no? ¿Keenesburg? ¿Se puede saber de qué lo conoces?
-¿Quieres que vaya a ver a un brujo bisexual famoso en Londres por hacer que la persona se quede inconsciente con la mirada? O bueno eso me han dicho.
-No nos vengas con ‘’o bueno eso me han dicho’’ porque sabemos que no es así. ¿Qué fue lo que te hizo para que le tengas tanto miedo a los brujos ? - Duke no contestaba, a lo que las neuronas de Mary se pusieron a funcionar. Y dio con la respuesta. - No me digas que fue él … quien…. - No pudo continuar la frase.
-Si, fue él quien me violó hace dos años.
Continuará...